Recuerdo un profesor que siempre nos decía.
¨ Aquí no se hace yoga, aquí se enseña como debes practicarlo ¨
La ¨práctica de yoga¨ en una clase impartida por un profesor no es la práctica en si, en realidad es el lugar en el que te enseñan como debes practicar en casa. Un clase no debe crear dependencia, sino fomentar la disciplina y mostrar el camino hacia una práctica más profunda y personal por y para uno mismo.
El Yoga, cuando se vive en todo su esplendor y no en tan solo para el cuidado y mantenimiento del cuerpo como simples estiramientos, se convierte en una herramienta muy poderosa y muy personal para el desbloqueo y auto-conocimiento de uno mismo, aplicando las distintas técnicas, asanas y pranayamas de un modo específico para el objetivo que cada uno desea en base a sus bloqueos generales o necesidades en el momento presente.
Es por ello que resulta tan o incluso más importante llevarla a cabo en casa.